Buenos Aires es una masa de personas que se mueve: luces, ruido, historia, fútbol, vedettes, cafés y bibliotecas. Son sus panaderías de barrio, los porteros de edificios lavando las veredas, la Belle Époque fusionada con la vanguardia en su skyline. Una metrópoli multicultural en la que conviven comunidades de chinos, japoneses, bolivianos, venezolanos y de otros recónditos rincones del mundo. Es sus escritores y músicos enamorados de su mística.
Una ciudad que no duerme y en la que a las 3 de la madrugada podés encontrar algún lugar abierto para comer. Buenos Aires son los pibes que piden monedas en las calles y las personas que bailan tango por una propina a la gorra. Una ciudad que se contradice pero que jamás pasará inadvertida.
«Me veras volar por la ciudad de la furia, donde nadie sabe de mi y yo soy parte de todos».
Gustavo Cerati
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